CÓMO SABER SI PADEZCO EL SÍNDROME DEL PERFECCIONISMO TÓXICO

“El tiempo es la dimensión del cambio. 

Si nada cambiara, no habría tiempo.”  

Aristóteles

Que levante la mano quién no quiere que todo le salga perfecto.

Pero, ¿Y qué es Perfecto? ¿ Quién lo cataloga así?

Considero que el perfeccionismo es un arma muy poderosa que nos puede llevar al éxito, pero también puede provocar todo lo contrario, y llevarte a un fracaso estrepitoso si lo llevas al límite.

Cuando llevas este perfeccionismo al extremo, sueles experimentar ansiedad, estrés, frustración y todo ello hará que una actividad o proyecto que debían ser divertidos o que te hicieran mucha ilusión, se vuelva una situación engorrosa, molesta y desagradable. Además, todo esto, hará que retrases al máximo, su puesta en marcha.

En mi opinión, hay dos clases de perfeccionismo,  el perfeccionismo digámoslos saludable, que es aquel que te motiva a hacer las cosas bien, y el perfeccionismo tóxico, que te lleva a postergar, a procrastinar y a dilatar situaciones hasta límites insospechados.

El agobio en el que solemos vivir, la autoduda, la baja tolerancia a la tensión, la exigencia, nuestro miedos internos... muchas veces nos llevan a adoptar esta actitud de procrastinación. 

Las personas que postergamos, no somos vagas, sino que nos movemos por otros sentimientos como pueden ser miedo al fracaso, pero también miedo al éxito, miedo a ser controlados, y muchas veces, preparamos infinidad de excusas y argumentos, para poder justificar, por qué nuestro proyecto no ha salido tan bién como podría haber salido.

Normalmente, el que posterga, acaba por no comprometerse con nada y padece lo que se conoce como indecisión crónica.

Si eres un perfeccionista tóxic@, es posible que te pases gran parte de tu tiempo, pensando cómo sería la mejor manera de afrontar tu tarea o tu vida, cuál sería el mejor camino para que el proyecto fuera el mejor, pero no actúas. Inicias tu senda hacia la postergación, porque nunca estás lo suficientemente satisfecho con tus propias ideas y sientes una gran necesidad de buscar información e ideas por cualquier sitio. O simplemente, dejas que esa voz que te habla desde el ego, te diga que desistas porque de todas manera nunca te va a salir tan bien como tú lo estas deseando.

Mientras tanto, el tiempo se te está agotando y al final acabas haciendo las cosas mal (o no todo lo bien que deseabas) y deprisa, o en el peor de los casos, acabas por no hacer nada.

Como te he explicado antes, para mi hay dos tipos de perfeccionismo, el saludable y el tóxico.  Cada uno de ellos tienen diferentes características que puedes ver en el siguientes cuadro:

Para evitar caer en este perfeccionismo tóxico, te aconsejo que empieces a actuar y a observar cómo se va desarrollando tu trabajo, tu vida,  y también tus emociones, a medida que vas avanzando en tu objetivo. A MI ME FUNCIONA!.

Si crees que estas derivando en un perfeccionismo tóxico, es importante que pares y te observes, para descubrir por qué y con qué finalidad estas actuando de esta manera. Posteriormente, reprende tu actividad, intentado actuar desde el perfeccionismo saludable.

Te propongo 8 argumentos por los cuáles postergas las cosas y los clasifico en internos y externos. Si crees que en tu caso existe alguno más, te aconsejo que lo añadas a la lista (y si te apetece lo compartas conmigo en la parte de comentarios)

INTERNOS: 

• Miedo al cambio
• Miedo al fracaso
• Dejarlo todo para el último momento
• Tendencia a adquirir demasiados compromisos

EXTERNOS:

• Tareas desagradables
• Tareas demasiado complicadas
• Flujo de tareas poco claro o con mala planificación
• Metas difusas

Te propongo un ejercicio: Identifica si tus razones son internas o externas.

Si eres de los que posterga, es posible cambiar, si estás dispuesto a ello, ya que no deja de ser una costumbre que has adquirido. Toda costumbre con esfuerzo, constancia y dedicación, se puede modificar y entonces puedes utilizar todo lo aprendido, estrategias, emociones, instrumentos... En beneficio de tu propio aprendizaje.

La próxima semana, mis suscriptores recibirán un pdf para descargarse, con  un ejercicio y una herramienta para ponerle solución a este tema. 

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Un abrazo,