"Quién no sabe poblar su soledad, tampoco sabe estar solo
entre una multitud atareada"
Charles Baudelaire
Y me senté sola a esperar.
Y de tanto esperar mi mente no paraba de pensar y de dar vueltas a 50 cosas a la vez. Mi mente parecía una centrifugadora. Pero de todos aquellos pensamientos, hubo una frase que me llamó la atención:
NACEMOS SOLOS Y SOLOS NOS MORIMOS.
Que triste pensé. Que gran paradoja la vida, que humor más negro tiene, que nos rodea de tanta gente y a la vez nos deja tan solos.Y continué pensando y continué meditando.
¿Será por eso que nos pasamos la vida anhelando estar con otros?
¿Será por eso que no podemos dejar de pensar en esa alma gemela que nos espera en algún lugar del mundo y que, cómo dicen los poetas, está destinada para mi y que la encontraré en algún lugar de mi camino porque Todo está predestinado?
¿Será posible que pensamos continuamente en ese amor porque le tememos a estar solos?
¿Tanto duele la soledad que huimos de ella?
¿Porqué a veces preferimos estar acompañados aún sintiéndonos solos por dentro, a estar realmente sin compañía?
Muchas son las historias que he escuchado de ese amor que llegará para llenarlo todo, de ese amor que satisfará todas mis necesidades y me llevará a cumplir cada uno de mis sueños.
Pero en el fondo escucho una voz que me dice que ¡Este amor es irreal! que está sacado de un cuento de hadas. Porque nadie tiene la obligación de satisfacerme, nadie tiene la obligación de hacerme feliz, porque la felicidad es algo que no viene de fuera, sino que nace y crece en mi interior y cada uno es responsable de cuidarla.
He comprendido que debo aprender a ser como un jardinero. Debo dejar que la semilla del amor crezca en mi interior, para mimarla y regarla, para que crezca fuerte y sana y no se marchite.
El amor es la única moneda que cuando la regalas te hace más rico.
Lo ve cada día en el reflejo de su espejo. No hay amor más grande que el que uno pueda llegar a sentir por uno mismo, porque es imprescindible amarse a uno mismo, para poder ofrecer amor al mundo.
¿Y a ti que sentimientos te provoca la soledad? Puedes compartirlos en los comentarios. Seguro que puedes ayudar a otras personas con tu experiencia.
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Increible el relato. Que sinceras y grandes palabras.
ResponderEliminarMuchas Gracias Evelyn!
ResponderEliminar¿Tanto duele la soledad que huimos de ella? La soledad es la máxima interpretación de quienes somos. Así las personas buscamos y buscamos para ver el reflejo de quienes somos en los otros, relacionarnos y nunca estar a solas. Es ese momento de soledad en multitud o soledad en medio de nada-nadie cuando nos damos cuenta de lo que realmente somos, ese Yo más profundo. Y no deja de ser eso lo que más miedo le da a uno detenerse a observar.
ResponderEliminarTe puedes esconder detrás de lo que sea, pero no detrás tuyo. ¿no crees?
Me encanta tu reflexión! Da miedo detenerse y observarse, y sobre todo es inquietante saber lo que puedes descubrir al hacerlo.
EliminarNo te puedes esconder de ti mismo, sólo puedes autoengañarte si lo que descubres no es exactamente lo que esperabas encontrar....
He ahi donde exactamente radica el miedo. Lo que encuentras no es lo esperado y tener que romper con TODO es lo mas dificil. Con una de las primeras cosas a las que debes enfrentarte es a ti en estado puro, con un choque hacia lo vivido, un rechazo a lo esperado y un duelo por el que pasar si o si, desenamorandote de ti y tu alrededor y volviendo a enamorarte y amar. Es entonces cuando te quieres a ti y eres capaz de encotrar tu otro yo/alma gemela o compañer@en la vida.
EliminarPero aun sabiendo eso...no te planteas si ese proceso lo vives una vez o se va a repetir cada x?